Capitulo 355

Después de un buen rato suben, se duchan ante la insistencia de Pau para sacarse el cloro de la pileta. Vuelve a pasarle crema, para que duerma tranquilo.

-Pp: amor mañana como hacemos? Te llevo y me vuelvo con los chicos?=
-Pau: o me llevo yo el auto y se quedan con vos, así no los sacamos
-Pp: como prefieras, igual alguna vez me gustaría a acompañarte
-Pau: está bien, ya veo alguna producción que no sea muy larga así los bebitos no se cansan
-Pp: a mí me van a acompañar?
-Pau: no se. No quiero que te desconcentres, tenes que estar 100 por ciento concentrado en la producción
-Pp: yo me concentro pero los quiero ahí conmigo
-Pau: bueno entonces vamos a estar con vos. En tu debut como modelo
-Pp: en mi vida me hubiese imaginado ser modelo
-Pau: a mí me encanta la idea.
-Pp: dormimos? Digo aprovechando que están dormidos
-Pau: si mejor aprovechemos (se da vuelta)
-Pp: seguís enojada?
-Pau: no, por?
-Pp: me das la espalda, no me abrazas
-Pau: mi amor después de lo de la pileta no podes pensar que siga enojada, y si no te abrazo es para que no te duela
-Pp: gracias, por lo de la pileta, una fantasía más que me cumplís. Te abrazo yo, si?
-Pau: dale, veni. Con razón los nenes son así de mañosos.
-Pp: asumo toda la responsabilidad, los Alfonso somos mimosos
El día martes comienza con trabajo para ella. Tenía una producción para la revista Nubilis. Cada vestido de novia que se probaba la hacía imaginarse su casamiento. Igual faltaba para eso pero le gustaba fantasear con la idea
Mientras Paula trabajaba Pedro se ocupaba de los bebitos, cuando se despertaron les dio la mamadera, les cambio el pañal y los bajo con él. Moria de ganas por meterlos a la pileta pero solo no se animaba
-Pp: estos son los momentos en los que quisiera que crezcan rápido. Quiero hacer tantas cosas con ustedes. Papito les va a enseñar a jugar al futbol. Porque quiero que jueguen futbol, no tenis como el abuelo Miguel
Los nenes lo miraban como si lograran entender lo que su padre decía. Movían sus cabecitas siguiendo la voz de Pedro.
-Pp: igual, en realidad no estoy apurado en que crezcan. Quiero disfrutarlos todo el tiempo. Pero mañana le vamos a prepara una sorpresa a mamita y ustedes me tienen que ayudar.
Prepara algo de comida, deja todo listo para prepara las mamaderas cuando les diera hambre. Pone una sabana sobre el sillón del living y los acuesta a los bebitos. Hacía mucho calor y se le ocurrió dejarlos más sin la ropita. Por un momento pensó en dejarlos sin pañal pero no se animo, llegaban a ensuciar el sillón y Paula se iba a enojar mucho.
Notaba como disfrutaban estar sin ropa. Paso el resto de la mañana jugando con ellos, notaba como cada vez hacían más cosas. Cada vez tenían más dominio de su cuerpito, amaba ver como Mateo intentaba levantar la cabeza y por momentos lo conseguía.
Decidió que el piso era más cómodo, por lo tanto bajo un par de sabanas, las estiro sobre el mismo y se acostó con los dos nenes. Obviamente Moro se incorporo a los juegos.
Cuando llego Paula se encontró con Pedro tirado en el piso, los dos nenes acostados sobre él y Moro durmiendo cerca de ellos
-Pau: pero que linda imagen, puedo unirme
-Pp: por supuesto pero tenes que cumplir con la regla del club
-Pau: que club?
-Pp: el club de los Alfonso, en realidad es un club de hombres pero podemos hacer una excepción y admitir a una mujer
-Pau: y que regla tengo que cumplir
-Pp: acá solo se ingresa en ropa interior
-Pau: Pedroooo
-Pp: es la regla estamos todos así, en realidad Moro es más liberal y le va la onda nudista, pero nosotros no nos animamos
-Pau: estas completamente loco mi vida, pero me encantan tus locuras. Me uno al club (acostándose a su lado y agarrando a Nico) Los extrañe mucho durante toda la mañana