jueves, 19 de enero de 2012

Capitulo 288

Llegaron cerca de las ocho de la noche, Paula no veía la hora de estar en su casa, su hogar, su cama, su lugar. Sin gente, en paz con su familia.
Habían sido dos días hermosos, pero extrañaba la casa y los bebitos también. La última noche habían estado bastante molestos. Tanto que Pedro le sirvió de excusa para llevarlos a la cama grande y dejarlos dormir con ellos
Al aproximarse a la casa Moro empezó a ladrar demostrando que ya conocía. Ellos lo miraban divertidos era una caja de sorpresas el perrito
Pedro bajo con Mati en brazos, y Paula, después con Nicolás.
Después de una comida rápida, y de darle de mamar a los bebes, se decidieron a dormir, estaban agotados, sin embargo los bebes no tenían ansias de lograr el sueño, estaban vivarachos que nunca. Definitivamente tantos días fuera de casa los habían afectado.
Pau: Duérmete mi niño, duérmete mi sol, duérmete pedazo de mi corazón- le cantaba a Mateo, dulce y suave, mientras lo mecía con delicadeza.
Pedro: estos bebes lindos se quieren dormir, y el pícaro sueño no quiere venir- continuo Pedro, acercando con Nicolás, hasta donde estaba su mama y su hermano.
Paula sonrió, observo une vez más el rostro de Mati, y sus ojos permanecían cerrados. Lo recostó sobre la cuna, espero expectante unos segundos, este ni “mosqueo”, era señal de que al fin se hallaba internado en sus sueños.
Pedro aun se mantenía ocupado con el más mañoso, que no dejaba de mufar, entonces él expresaba un “sh, sh,sh” para transmitirle tranquilidad y que no estallara en llanto. Pedro cambio la posición otra vez y lo puso sobre su pecho, pero no sirvió de nada. Nico no paraba de jugar con sus manitos, que experimentaban la anotomía del hombro de su padre.
Pau: pásamelo- le dijo a Pedro acercándose.
El de mala gana y lleno de frustración, dándose por vencido se lo entrego en brazos.
Paula lo meció una y otra vez por casi media hora, hasta que lo noto somnoliento, y una vez más volvió a cantarle, y logro dormirlo.
Pedro la observaba embobado, tenia tanto tacto, tanta dedicación y si, era la mama y quien más que ella para saber lo que su hijo necesitaba.
La espero en la cama, y cuando se acerco la abrazo.
Pedro: tengo la mama más dulce y sexy – le dijo besándole el cuello.
Pau: hasta lo dulce te la puedo remar, ahora sexy espera que baje unos kilos y por ahí me la creo-inquirió divertida.
Pedro: lo decís para que te diga que estas flaca y linda- la peleo.
Pau: ¿entonces no me lo vas a decir?- le dijo con una cuota de angustia en su rostro.
Pedro sonrió y volvió a besarle el cuello: no, te voy a decir sos hermosa y que te amo
Paula giro: yo también te amo- y beso sus labios.
Pedro: te tengo que grabar
Pau: ¿eh?- pregunto desencajada
Pedro largo una carcajada: hablo de cuando le cantas a los bebes, sería un lindo recuerdo ¿Qué estaba pensando tu mente podrida?
Pau rio: nada- y le pego suavemente en el hombro- además seria el horror ¡Canto horrible gordo!
Pedro: no importa, para mí y para tus hijos siempre vas a ser Celine Dion
Paula se mordió el labio sobrándolo.
Pedro: ¿dormimos?
Paula asintió, se acurruco en el pecho de su amor, y en cuestión de minutos cayeron rendidos.
La mañana los encontró abrazados. La primera en abrir los ojos fue Paula y se quedo largo rato mirando a su hombre como dormía plácidamente. Se levanto despacio, alzo en brazos a Mateo que ya estaba despierto y fue a la cocina a preparar el desayuno. Cuando vuelve a la habitación ve a Pedro acostado con Nico sobre su pecho. El sonreía mientras su hijo movía sus manitos e intentaba levantar la cabeza


Capitulo escrito en gran parte por @Juliamorciego.

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