Capitulo 300

Finalmente se acostaron cerca de las seis de la mañana. Gonza lo ayudo a bajar y armar las cuna móviles. Durmieron hasta el mediodía, en realidad un poco menos porque en el medio los bebitos comieron nuevamente.
Las únicas levantadas eran Alejandra y Gladys seguramente en un rato llegarían los demás, Gonzalo no tenía intenciones de despertarse.
-Pp: buen día, que madrugadoras
-Gladys: jaja los viejos dormimos poco
-Ale: y yo me levante a ayudar
-Pp: jamás pensaría que sos vieja. Hee ustedes se enojarían si vamos un ratito a ver a Guingui y a Tito? Ellos todavía no conocen a los bebitos. Solo a saludar, volvemos para almorzar acá
-Gladys: no tenes que pedir permiso Pedro. Por supuesto que pueden ir. Es más si quieren comer allá no hay problema.
-Pp: no no comemos acá. En todo caso mañana almorzamos con ellos antes de irnos. Pero seguro se ponen contentos de ver a los Alfonsito
-Pau: (lo abraza por la espalda) viste lo que es Abu?
-Gladys: es entendible que estés tan enamorada, este chico es único.
-Pp: wau cuantos halagos. Es cerca amor o vamos en la camioneta? Todavía no me ubico muy bien acá
-Pau: es relativamente cerca pero vamos en la camioneta, hace mucho calor
-Pp: muy bien, en un rato estamos de vuelta.
Ponen a los bebes en las sillitas, suben a Moro y van a la casa de los abuelos Chaves. Apenas estacionan la camioneta salió Tito a recibirlos
-Tito: que linda sorpresa. Pasen, los ayudo con algo?
-Pau: hola Abu. No hace falta ya bajamos. Y Guingui?
-Tito: está en fondo, si te apuras la sorprendes
-Pau: entonces nos apuramos
-Pp: hola Tito, como estas?
-Tito: muy bien y ahora mejor. Mira lo que son mis bisnietos
-Pau: entremos que hace mucho calor
Entran a la casa y se encuentran con Guingui que de la emoción se tuvo que sentar porque se le aflojaron las piernas
-Pau: tranquila Abu, no te emociones
-Guingui: como no me voy a emocionar? Vienen así de sorpresa y con estas dos preciosuras. Son hermosos
-Pp: la verdad que son los bebes más lindos. Quiere tenerlo (pasándole a Nico) anda con la bisabuela
-Tito: che yo también quiero alzar a uno
-Pau: toma, acá te paso a Mati. Despacito así no se asusta
Se quedaron un buen rato y se fueron a almorzar. Obviamente dejando la promesa de pasar todo el martes con ellos. Pedro tenía intención de invitarlos a la casa por unos días pero antes tenía que consultarlo con Paula, para ver si ella estaba de acuerdo y se iba a sentir cómoda
Ya de vuelta en la casa de Gladys habían llegado la mayoría de los familiares. Almorzaron entre risas, bromas. Los bebitos pasaban de brazo en brazo, cosa que a Paula no la entusiasmaba demasiado y en honor a la verdad a Pedro tampoco.
Después de almuerzo prepararon un bolso para los bebes y el equipo de mate. Se fueron en la camioneta a pasear un poco, necesitaban un rato a solas. Los bebitos estaban un poco alterados y el movimiento de la camioneta se calmaban
-Pau: parece que en esto salieron a vos, estaban re chinchudos y apenas empezamos a andar se calmaron
-Pp: si, les gusta andar en auto. Ya sabemos para cuando estén muy molestos
-Pau: necesitaba un rato a solas, demasiada gente entre ayer y hoy
-Pp: yo también necesitaba estar tranquilos. Te confieso que no me encanta que `pasen de brazo en brazo.
-Pau: que suerte que me lo decís. Creía que era la única loca
-Pp: mmm. (Parando la camioneta) acá te parece bien?
-Pau: si, acá esta lindo. Los pongamos en el cochecito para poder pasear un rato
-Pp: como usted mande señora. (Se acerca y la abraza) te amo, no te olvides de eso